Opiniones

 

Aquí  está

Aquí  está, aquí está, aquí está……….la ley  de educación P.LOMCE. Nos ha pillado el toro y encima nos quejamos. ¿Qué hemos hecho para merecer esto? Está claro que tenemos lo que nos merecemos. Lo malo del tema que lo sufre todo el mundo y será una herencia para generaciones futuras. Tengamos confianza en la ciudadanía  y esperanza en la capacidad de reacción de la gente.

Hay madres de familia, que no pueden alimentar a su hijos, y se ven en la obligadión de buscar en la basura comida para subsistir, mientras que la gente que nos deberia gestionarr y defendernos no roban, 

¡Cómo podermos explicar este fenómeno a nuestros alumnos¡

 

 

            EL RINCON DE LA ABUELA  PACA

 

 

Hace tiempo que no reconocía hadas. Olvidé las sensaciones que produce su proximidad; quizás desde que comencé a madurar…. ¡Eso es demasiado tiempo!

Hasta que los buenos aires del verano, me otorgaron entrar en la cadencia de un rincón mágico: El rincón de la abuela Paca.

Este pequeño relato no es un cuento, no es una leyenda, solo un sencillo homenaje a estas

vecinas y vecinos que han sido son y serán mujeres y hombres mágicos, al ser capaces de transmitirte sus historias cotidianas, cultura, vivencias, sensaciones…cual sinfonía de sueños en noche de verano.

Ustedes los encontrarán si en ello ponen empeño…en esos pequeños rincones, donde pinta la sombra, con las sillas al fresco, a la caída de la tarde.

El primer tiempo de esta sinfonía suele ser adagio, tranquilo; pero su marcha va increscendo, cuando empiezan las voces y los temas variopintos sobre la relatividad del tiempo en sus múltiples facetas, la familia, la crisis también en sus múltiples facetas, las costumbres. Con los temas de despensas y repertorios, entra en  acción el ritmo de allegro-vivace. A todos nos gusta oír y hasta casi degustar aquellas recetas milenarias que repiten con el mismo esmero, tal cual lo vieron de sus abuelas y sus abuelas de sus abuelas y así sucesivamente…

La curiosidad nos transporta a fogones ancestrales y preguntamos sobre dichas recetas y sus pasos; sólo eso; pues nunca repetiremos fórmulas ni reposterías; el secreto de su buen hacer, lo seguirán teniendo ellas, nuestras hadas.

Introducirte en esta sinfonía de verano es un lujo para los sentidos. Mi pareja y yo descubrimos este rincón hace ya algunos veranos y cuando llega la hora décima, nos encaminamos a descubrir las novedades que nos depara la noche.  Llegados al rincón nos hacen sentir en palco especial y sin pagar entrada empezamos a participar como personajes secundarios, pues los protagonistas principales son esas hadas octogenarias que llevan la voz cantante: Paca (que ya no está, se marcó a su trono); Nieves, José, Rufo y algún otro caballero andante o dama menesterosa acompañada con algún joven doncel que paso a repostar de sus andanzas nocturnas y se quedó. Y si los relatos derivan hacia historias misteriosas con niños desparecidos…personas que marcharon para no volver, vidas que vivieron y quedaron para siempre, guerras o caballeros templarios…Entonces la magia les empieza a envolver a ellos…a nosotros… a todos: ¡Estamos atrapados!...No hay prisa…ni cansancio, si sueño, solo curiosidad, armonía, tiempo y magia.

Las hadas nos han tocado son su barita mágica, la de la sabiduría no ilustrada, la filosofía de su vida. Su voz, su serenidad, su tiempo ¡Para no correr, si la meta final está pronta!

Así es el transcurrir de nuestras noches de verano, día a día, año a año; pero el tiempo y el devenir de las estaciones, como dije antes, pone a las hadas en su  trono. Paca, nuestra hada madrina, se elevó hace varios meses, hacia reinos mas etéreos. En su rincón, que ahora es nuestro, siempre perdurará su recuerdo; no hay noche que no se pronuncie su nombre, su barita de estrellas sigue iluminándonos hasta convertir la tertulia en la cadencia final, es cuando todos al unísono miramos al cielo, para ver pasar el ultimo avión de la noche el que nuestra Paca como referencia para irse a descansar. En este punto, levantaba torpemente, sus mas de noventa años y sus mas de 100 kilos y entonaba el acorde final ¡Es mi hora, hasta mañana hijos! Y todas las noches mirando las estrellas que alumbran el rincón todos repetimos un: ¡Hasta siempre, Paca, nuestra hada madrina! ¡Ya sabes, te esperamos aquí en tu rincón como todas las noches!

 

EN EL HOSPITAL

Si por razones fundamentales de subsistencia, del  tipo que sea debes quedarte en un hospital, la parte social del individuo, comienza a maquinar recursos para desarrollar sus nuevos espacios y formas de convivencia.

Sin ánimo de ofender a nadie., o mofarse de todo lo que conlleva la palabra  hospital, se me antoja en una circunstancia anterior, como si me hubiera mudado por un corto espacio de tiempo, a otro barrio.

Primero tomas posesión de tu hábitat, que siempre deber compartir con un inquilino; después de las primeras palabras, resulta que suele ser del mismo  pueblo , casado con una prima lejana de algún conocido ;resulta que casi sin saberlo somos íntimos y ,si no es el enfermo , son su allegados, pues acabas aceptando y compartiendo las virtudes y los vicios , que no descubrirías a nadie en otras circunstancias .Los buenos días y las buenas maneras , el qué tal , los hijos , el trabajo de uno y la vida de ascendientes y descendientes son casi dosis de medicina que no se debe olvidar para agradar y hacer mejorar la instancia.

En tus ratos de ocio, que son largos, puedes hacerlo por los grandes pasillos dónde los vecinos colindantes entran y salen con sus historias incorporadas, además de los bártulos sanitarios, que según sean  más  o menos aparatosos, te atreves a elevar un diagnóstico personal del enfermo y de su entorno  .Las caras de los vecinos , te llevan resultando familiares, así cómo los visitantes . Que de alguna manera los catalogas según su horario para visitar, el trato que dan al enfermo , las insinuaciones más o menos claras con referencias a su salud, etc. y sacar tus propias conclusiones sobre la gravedad del problema.

Si necesitas renovar energía , te permites un pequeño paseo por el parque infantil, es decir, en la planta de pediatría, que es cómo una casa de campo, se respira vida y colorido por los ramos de flores que adornan las instancias

El entorno y las viviendas de este barrio goza de ciertos privilegios que te hacen sentir que la vida , es eso ¡VIDA!

   En fin , entre uno y otro fax de imaginación, pasas el tiempo; tomas cariño a todos los habitantes del barrio, sientes que sus problemas, serán los tuyos ;más tarde o más pronto respetarás sus vidas y por tanto sus historias ; hablas y escuchas, por qué no te queda otra.

 Y de repente , por aquello de no tener prisa, observas un hecho aparentemente normal ,y lo conviertes en sublime  :Estoy hablando de un hijo , que baja con su anciano padre a desayunar: el hijo ayuda al padre a sentarse ,coloca su bandeja, le hace trocitos su croassan; a continuación el hijo asiento a su lado , con el tenedor ayuda a ingerir los alimentos ,un trocito, un sorbito de leche ¿Qué normal? al padre le tiemblan las manos y en un avance de valentía intenta coger sólo su desayuno derramando todo el contenido sobre la mesa ¡Q UÉ BRONCA! PENSÉ. Pues no, mi subconsciente me había engañado: El hijo, le limpio, le animo y le consoló.

El proceso se repitió una y otra vez, el hijo se levantaba una y otra vez, el padre miraba a los comensales , con la mirada del niño que ha hecho algo malo y necesita la absolución del adulto. Es verdad que todos los allí presentes mirábamos, pero no mirábamos la torpeza, ni la demencia, sino la paciencia y la tolerancia. LO SUBLIME

 Aquel cuadro de dignidad, me recordaba los primeros bocetos de la vida, cuándo trabajas con tus hijos, el primer contacto con la comida, la paciencia para coordinar el manejo de los utensilios, los primeros enfados, porque apurada de tiempo, no das más de sí. 

Para aquel hijo, su reloj, se paró en su padre, sus movimientos eran lentos y sosegados.

Su tez, desprendía ternura y la sonrisa que nos ofrecía en su cuadro personal nos decía: es natural, soy semilla de este hombre, soy su vida y su esperanza

Lo importante del cuadro, no era que le daba de comer, le limpiaba ¡Qué sí¡.Lo importante del cuadro no era, que le hablase con  vehemencia con sus gestos y sus caricias,!Qué sí!

Lo importante fue, que estaba pintando su propia dignidad y la de todos los espectadores que observaban su obra. Con lo cual, yo no tengo palabras de agradecimiento para aquel hijo, su padre, los vecinos, los ramos de flores del pasillo de maternidad, y la ociosidad que te hace reflexionar en estas cosas que acontecen en las largas instancia en el hospital.

Y señores, con la maleta y el enfermo repuesto, te traes a casa, buenas intenciones, que es de suponer se las llevará el tiempo, al igual que hacemos a principios de año con las dietas y las buenas maneras. Y para justificar tu poca  practica, socarronamente piensas que deberían sacar al mercado, revistas mensuales que te programen lo pasos a seguir para cuidarnos de la dignidad de nuestros mayores y de paso la nuestra ,algo así, como un manual de instrucciones igual que existen a la inversa, de cómo cuidar de nuestros hijos en todas las etapas de la vida.

En fin, resulta que la mudanza  al barrio del hospital ,no es tan negativa como parece. Si el tema, no ha tenido muchas complicaciones, te llevas contigo mucha gente, amigos experiencias y como dije antes muchas reflexiones y buen rollo .Es decir, el equipaje, más que lleno.     

Sigo en el camino

Bueno chicas y chicos. esta es una entrada de desaparición, pues hace mucho tiempo que no escribo y no por falta de tiempo, sino por falta de tecnología. He estado intentando añadir algunos pensamientos a mi blog, pero reconozco que sigo siendo tan torpe en esto de dar a las teclas, que cuando quiero empezar a andar con ellas, mis pensamientos están ya en el olvido.

!Vaya!, parece que algo voy sacando. Hoy ojeando el el periódico El Mundo, y no por que me guste dicho medio de comunicación, pero era una manera como otra de pasar el tiempo,leía el siguiente artículo: Los cien mejores colegios de España y que han obtenido las mejores puntuaciones: ¡Oh esto me interesa¡aunque relativamente pues es bien cierto que en todo está la relatividad de las cosas, pero como están por puntuaciones, me engancho.Vistazo rápido, colocados de mas a menos puntuación: privado, , privado, privado,........concertado,concertado¡¡¡.¿Pero cómo es posible que todos sean privados? ¿Es que no hay ninguno público? ¡Lo que nos faltaba !.Me digo a mí misma : no te pongas nerviosa y vuelve al principio del articulo que algo no cuadra.Y.....así lo hago. Efectivamente, en letra mas pequeña ponía un rótulo  Colegios Privados. ¡Qué alivio¡